Anorexia Nervosa

La Anorexia Nervosa (AN) es un desorden psicológico que amenaza la vida de la persona que la padece, se caracteriza por la pérdida de peso (o falta de ganancia apropiada de en el caso de niños en crecimiento): dificultad para mantener un peso apropiado de acuerdo a la edad y estatura, miedo irracional a engordar o ganar peso y, en muchas personas, una distorsión de la imagen corporal.  Las personas que sufren AN generalmente restringen el número de calorías y el tipo de alimentos que consumen; algunas personas también se ejercitan compulsivamente, se purgan vía vómito y laxantes y/o se dan atracones, presentan conductas anómalas en cuanto a sus hábitos de alimentación y pueden sentirse gordas o desproporcionadas a pesar de tener un peso por debajo de lo considerado normal, estas personas le dan mucho valor al control de su peso y forma corporal por lo que hacen grandes esfuerzos que interfieren con sus actividades diarias.

El trastorno tiene un impacto negativo en la vida familiar, social, laboral, académica y emocional de la persona.  Al inicio es posible que no se observen problemas excesivos, incluso el afectado puede sentirse satisfecho con la pérdida de peso ya que se ve compensado por su entorno, pero después de un tiempo aparecen síntomas que indican que algo anda mal.

 

La AN no se es acerca de la comida, es una forma insana de manejar problemas emocionales. Las razones por las que se desarrolla difieren de persona a persona, pero puede ser una forma de controlar áreas de su vida en las que se siente fuera de control y su imagen corporal puede llegar a definir su sentido de valor, también puede ser una forma o miedo de expresar emociones complejas como dolor, ansiedad, miedo, etc.

La AN afecta a personas de todas las edades, géneros, orientación sexual, raza, etnia, peso o estructura corporal y posición socioeconómica. Los psicólogos e historiadores han encontrado evidencias de síntomas de AN en personas que vivieron cientos o miles de años atrás, sin embargo fue hasta en los años 80 que se empezó a estudiar científicamente más a fondo.

 

El trastorno frecuentemente da inicio durante la adolescencia, sin embargo actualmente se observa un número creciente de niños y personas adultas diagnosticadas con AN. La persona no necesariamente debe presentar bajo peso o verse demacrada para tener AN, estudios han encontrado anorexia en personas con cuerpos grandes.

Existen dos sub-tipos de AN, ambos son enfermedades mentales serias que requieren tratamiento:

Anorexia  restrictiva: las personas restringen severamente la cantidad y los tipos de comida que consumen, lo que puede manifestarse en restricción de ciertos grupos de comidas (Ej. carbohidratos, grasas), conteo de calorías, saltearse tiempos de comida, reglas obsesivas y pensamientos rígidos (Ejm. Comer comidas solo de un color o, ser vegetariano), excesivo ejercicio.

Anorexia purgativa: dentro de este subtipo las personas también restringen considerablemente el consumo y el tipo de alimentos, pero adicionalmente presentan comportamientos purgativos y atracones.  Durante los atracones consumen grandes cantidades de comida y experimentan un sentimiento de “pérdida de control” que compensan con comportamientos purgativos como el vómito, uso indebido de laxantes, diuréticos o enemas y ejercicio excesivo.

 

 

De acuerdo al DSM-5 (Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders, Fifh Edition), para dar un diagnóstico de AN deben llenarse los siguientes criterios:

  1. Significativo bajo peso en relación al contexto de edad, sexo, trayectoria de desarrollo y salud física, debida a una restricción en la ingesta de la energía requerida.
  2. Miedo intenso a ganar peso o hacerse gordo, aunque exista bajo-peso.
  3. Percepción disturbada del peso y la forma del propio cuerpo; auto-evaluación personal indebidamente influenciada por el peso o forma del cuerpo o, negación del serio riesgo del bajo-peso actual.

Aun en el caso de que no se cumplan todos los criterios de la DSM-5 para la AN, un serio Trastorno de la Conducta Alimentaria (TCA) puede existir. La anorexia atípica incluye a aquellos individuos que llenan los criterios de la AN pero no tienen un peso abajo de lo normal a pesar de una pérdida de peso significativa.

 

 

Los síntomas y señales de la AN están relacionados con la inanición, pero el desorden también incluye temas emocionales y de comportamiento relacionados a la percepción irrealista del peso corporal y al fuerte miedo de ganar peso y engordar.

Síntomas y señales físicos

Los síntomas físicos incluyen significativa pérdida de peso, apariencia delgada, conteos sanguíneos anormales, fatiga, insomnio, mareos o desmayos, decoloración azulada de los dedos, cabello delgado que se quiebra o cae, lanugo, amenorrea, estreñimiento, piel saca o amarillenta, intolerancia al frio, arritmia cardiaca, baja presión arterial, deshidratación, osteoporosis, sudoración en brazos y piernas, fallas renales, sistema inmunológico comprometido, anemia.

 

Síntomas y señales emocionales y de comportamiento

Los síntomas de comportamiento y emocionales incluyen intentos de perder peso ya sea por restricción severa de ingesta de alimentos o inanición mediante dietas, ejercicio excesivo, atracones y vomito auto-inducido, toma laxantes, enemas o implementos de dieta o hierbas, preocupación excesiva por la comida, negarse a comer, dietas crónicas a pesar de tener peso de riesgo, conteo de calorías y contenido de grasas en las comidas, negación del hambre, mentiras acerca de las cantidades de comida ingeridas, aislamiento social, irritabilidad, ansiedad, dificultad para concentrarse, pérdida del lívido, letargo, apatía,  auto-lesiones, pensamientos suicidas, obsesión o pensamientos obsesivos alrededor de la comida, rituales durante las comidas (Ej. cortar la comida en pedacitos mínimos), fijación continua en la comida, recetas, cocina, etc., no querer comer en público, quejas sobre el peso y forma del cuerpo.

 

La AN no es un desorden simple, a la fecha se desconoce exactamente que la causa. Como en muchas otras enfermedades actualmente se considera que la AN se desarrolla debido a una combinación de factores biológicos, psicológicos y ambientales.

 

Factores biológicos, aunque aún no está del todo claro se cree que existen factores genéticos que hacen que algunas personas sean más vulnerables a la anorexia. Algunas personas tienen una tendencia al perfeccionismo, sensibilidad y perseverancia, todos rasgos de personas que sufren AN.

 

Factores psicológicos, características emocionales pueden contribuir a la AN.  Algunas mujeres jóvenes pueden tener rasgos de personalidad obsesiva-compulsiva que les facilita apegarse a dietas y dejar la comida a pesar de tener hambre; pueden tener una tendencia extrema al perfeccionismo, que las hace creer que nunca serán suficientemente delgadas; pueden sufrir de niveles más altos de ansiedad y restringir su ingesta de comida buscando reducirlos.

 

Factores ambientales, la cultura moderna enfatiza la delgadez; el triunfo y el valor de la persona están equiparados con ser delgado; la presión de los pares, especialmente en la niñas, puede influir en el deseo de ser delgado; en los medios de comunicación se refuerza contantemente el ideal del cuerpo delgado; la industria de las dietas promueve la figura esbelta a veces dejando de lado la salud de los consumidores. Algunas profesiones como el ballet, equitación, modelaje requieren ser delgado y por lo tanto promueven la reducción de peso.

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La AN como cualquier otro TCA, puede volverse crónico e incluso acabar con la vida; desafortunadamente las personas con AN no quieren recibir tratamiento, al menos al inicio, su deseo de ser delgadas sobre-pasa el tema de su salud.  Si un Ud. sospecha que un ser querido pueda sufrir de AN u otro tipo de TCA, hágala ver que es urgente que visite a un profesional especializado en el tema, debe de ser un psicólogo, nutricionista o médico que tenga experiencia en el tratamiento de los TCA.  En Asociación Estima le podemos orientar en la búsqueda de este profesional.

 

Si tú experimentas alguno de los síntomas listados anteriormente o, si sospechas que sufres un TCA, busca ayuda. Si estas escondiendo tu posible AN de tus padres, trata de encontrar alguien en quien confíes y cuéntale lo que te está pasando.

Puede ser difícil notar los síntomas y signos de la AN porque las personas esconden su delgadez, hábitos de comida y/o problemas físicos.  Si a Ud. le preocupa que su ser querido pueda sufrir de AN, busque las señales siguientes: se saltea comidas, pone escusas para no comer, come muy poca variedad de comidas (comidas “seguras” usualmente bajas en grasa y calorías), está adoptando rituales rígidos (como escupir los bocados después de masticarlos), prepara comidas elaboradas para otras personas pero rehúsa a comerlas, se pesa o se mide muy seguido, se ve en el espejo buscando defectos o gordura, se queja de estar gordo, no quiere comer en público,  se viste (cubre) con mucha ropa, tiene cayos en los nudillos de los dedos o dientes erosionados debido a que se induce el vómito.

 

  • Después del asma y la diabetes tipo 1, la AN ocupa el tercer lugar entre las enfermedades crónicas en personas jóvenes.
  • Los jóvenes entre 15 y 24 años que sufren AN tienen un riesgo 10 veces mayor de morir que sus compañeros de la misma edad.
  • Los varones representan el 25% de las personas que sufren AN y tienen un riesgo mayor de morir debido a que son diagnosticados más tarde por asumirse que ellos no son afectados por los TCA.
  • Comportamiento alimentarios sub-clínicos (incluyendo atracones, vomito, abuso de laxantes e inanición para perder peso) son casi tan comunes en los barones como en las niñas.
  • Estudios han encontrado un crecimiento en la incidencia de AN durante los últimos 50 años en niñas entre los 15 y 24 años. La incidencia se mantuvo estable en otros grupos de edad y en el sexo masculino.
  • Los síntomas de los TCA están presentándose en edades más tempranas, tanto en hombres como en mujeres, esto de acuerdo a investigaciones y los reportes clínicos.

Referencias

NEDA, National Eating Disorders Association, https://www.nationaleatingdisorders.org/

ACAB, Associació contra IÁnoréxia I la Bulímia, http://www.acab.org/

Eating Disorder HOPE, https://www.eatingdisorderhope.com/

Mayo Clinic, https://www.mayoclinic.org/

National Eating Disorder Colaboration, http://www.nedc.com.au